Limache Hijar Jimena Fiorella

La platafoma de Tik Tok ha revolucionado la Industria musical, siendo ideal para artistas emergentes que quieren darse a conocer. El algoritmo de esta red social permite que cualquier pieza musical alcance millones de reproducciones en cuestión de días, sin embargo, representa retos como la sobreproducción de contenido, la falta de sostenibilidad en el éxito y el riesgo de transformar la música en un producto de marketing.

Sabemos que este medio digital funciona a través de videos cortos, rápidos y de publicación continua, por lo que los artistas enfrentan el reto de la sobreproducción de contenido. Para mantenerse relevantes, los músicos se ven casi obligados a crear videos a diario, distrayéndose de su principal objetivo de seguir un proceso artístico de calidad. La urgencia de adaptarse al ritmo frenético de la plataforma puede comprometer el desarrollo de proyectos más auténticos como sucedió con la cantante estadounidense Halsey, quien explicó que Capitol Records, su disquera, estaba condicionando el lanzamiento de una canción a que primero se volviera viral en TikTok. Otros artistas como Florence Welch, Charli XCX y FKA Twigs también hablaron sobre la presión de sus sellos para producir contenido en esta red social.

Por otro lado, la contraparte de la rápida viralización, es el olvido inmediato. Es decir, el éxito de un producto musical corre el riesgo de ser fugaz, dejando a los artistas en una montaña rusa de popularidad que pocas veces se mantendrá en lo alto. Si nos fijamos en el single “Me porto bonito” (2022) de Bad Bunny entendemos que, aunque digitalmente tiene unos resultados excelentes, con 2,5 millones de veces usada en TikTok, no cuenta con representación analógica, en el año 2022 no ocupó ninguna vez el número uno de Los 40 y otras radios de España.

Bad Bunny ft. Chencho Corleone - Me Porto Bonito (Video Oficial) | Un Verano Sin Ti

Los propietarios de las discográficas son capaces de crear potentes campañas de marketing que llegan a un público más amplio, lo que es beneficioso, pero abre la probabilidad de que la música se convierta en un producto más de publicidad, ya que priorizan fórmulas que funcionan por encima de la autenticidad artística.

Por lo tanto, TikTok es una herramienta poderosa que abre puertas inmensas para los artistas emergentes. Sin embargo, no está exenta de retos: la exigencia de producir contenido constante, la inestabilidad del éxito y la transformación de la música en un producto de consumo rápido. El desafío está en encontrar un equilibrio entre aprovechar las ventajas de esta plataforma y preservar la autenticidad y arte que definen a la música.

 TIK TOK